Hemos hablado con frecuencia de la importancia que tiene para un escritor la visibilidad. Por explicarlo con sencillez, la importancia que tiene que la gente sepa que existes. Porque si no saben que existes, es imposible que quieran leer tus libros.
Pero antes de empezar a trabajar la visibilidad hay un paso previo que la mayoría de autores se saltan, pero que sin embargo es básico. Hablamos del posicionamiento como escritor.
No nos referimos al posicionamiento SEO, es decir, a aparecer en los primeros resultados de Google para una búsqueda concreta (aunque sin duda esto también es importante); nos referimos a definir con criterio ante quién te vas a hacer visible y cómo quieres ser conocido.
Imagínate por ejemplo que tienes una gran visibilidad como arquitecto, pero ahora has escrito tu primera novela de ficción. Tu visibilidad como arquitecto (aunque puede ayudarte) no te servirá de nada para vender tu nuevo libro.
Porque tú necesitas ser conocido ahora como escritor (no como arquitecto) y entre lectores (mejor si son de tu género), no entre profesionales de la arquitectura o personas que necesiten los servicios de un arquitecto.
Esa alineación perfecta entre lo que quieres mostrar de ti y ante quién vas a mostrarlo es a lo que llamamos posicionamiento como escritor.
Los síntomas de un mal posicionamiento como escritor
Hay cuatro síntomas claros que señalan que no has trabajado en tu posicionamiento como escritor de manera adecuada.
- No se sabe a qué te dedicas.
- No llegas a las personas adecuadas.
- Tienes una presencia online pobre.
- Pones precios bajos a tus libros.
Vamos a ver cuáles son esos síntomas y cómo los puedes subsanar.
1. No se sabe a qué te dedicas
Cuando una visita llega a tu web, ¿qué se encuentra?
¿Hablas de escritura creativa? ¿De gatos? ¿De tus proyectos de costura? ¿De todo esto y mucho más?
Los escritores sois gente creativa, muchas veces sois multidisciplinares, personas con un montón de intereses de una enorme variedad. Eso hace que vuestras webs sean a menudo un cajón de sastre donde habláis de todas vuestras pasiones.
El resultado es que alguien que llegue a tu página web tiene muy difícil hacerse una idea clara de que eres escritor y de cuáles son tus últimos libros publicados.
O puede que entienda que el autor de la página es un escritor y vea que tienes una sección dedicada a tus libros, pero no entenderá qué tiene que ver tu novela policíaca con las técnicas de decoración de cajas de madera.
Piensa bien en lo que cuesta conseguir que una visita llegue a tu web. Has tenido que escribir contenidos, difundirlos en las redes sociales, dejar comentarios en otros blogs, hacer guest posting… Pero si esa visita es incapaz de discernir que eres escritor y que tienes un libro fantástico que puede comprar, habrá sido trabajo perdido.
Solución:
Piensa en cómo quieres ser conocido en un plazo de tres a cinco años.
Si tienes varias facetas creativas, tal vez prefieras que la gente te conozca por ser un gran ilustrador, y no tanto por tu faceta de escritor.
¿Quieres dedicarte a impartir clases de escritura creativa o a corregir los libros de otros autores? Si es tu sueño, perfecto. Pero si no lo es, no enfoques tu blog hacia otros escritores. Mucho cuidado con esto, porque muchos autores confunden una web de escritor con una web sobre escritura y no son lo mismo ni se dirigen al mismo público, como te explicamos en este artículo.
Así que te va a tocar elegir.
Si quieres ser escritor, si tu objetivo es que en unos años tu nombre sea reconocido como el de un autor con varios libros de éxito en su haber, céntrate en ello. Esto no significa que abandones tus otras pasiones, pero sí que debes enfocar tu web hacia tu trabajo de escritor.
Eso que deseas que sea tu carrera dentro de unos pocos años, refléjalo en tu página web desde hoy.
Deja claro que eres escritor, deja claro qué escribes, deja claro cuáles son tus libros publicados. Si todo eso no queda clarísimo en tu web, tienes un problema de posicionamiento.
Para asegurarte de que lo estás haciendo bien dile a un conocido que revise tu web y te diga si le queda claro quién eres y a qué te dedicas. Si tiene problemas para definirlo, es hora de que reenfoques tu web.
2. No llegas a las personas adecuadas
Este punto está íntimamente ligado con el anterior.
Si tienes una web cajón de sastre en la que cabe de todo, si no has definido bien cómo quieres ser conocido y si no has volcado esa idea con claridad en tu web, lo más seguro es que no te estés situando ante las personas adecuadas.
Dirigirte hacia las personas apropiadas es vital, porque de otro modo tu mensaje se perderá.
Si en tu web das preponderancia a tu faceta de ilustrador y hablas sobre ilustración, no te puede extrañar que nadie se interese por la novela young adult que acabas de publicar.
A tu web llegarán otros ilustradores, pero no lectores de Y.A. Y si a tu web no llegan lectores de Y.A. tu libro no se venderá.
Tampoco llegas a las personas adecuadas cuando tienes un blog de escritura y no un blog de escritor. Es decir, cuando escribes para otros escritores en lugar de para aquellos que podrían ser los lectores de tu novela.
Solución:
En primer lugar, asegúrate de que tu web cuenta con claridad quién eres y lo que haces. Repasa otra vez el punto anterior si es necesario.
A continuación asegúrate de que te estás dirigiendo a lo que llamamos tu lector ideal. Es decir, aquel grupo de lectores a los que tu libro les puede interesar, que van a disfrutar leyéndolo.
Y luego diseña una estrategia para captar su atención. Si tienes una web, lo lógico es que uses tu blog para hacer marketing de contenidos, publicando artículos sobre temas que interesen a tu lector ideal.
En esta entrada hablamos largo y tendido sobre el lector ideal y sobre cómo llegar hasta él.
3. Presencia online pobre
Los dos puntos anteriores son los dos principales errores que cometen los escritores en su posicionamiento, pero hay otros dos más. Su importancia es menor, pero no nula.
El primero de ellos es tener una pobre presencia online.
De nuevo este error de posicionamiento como escritor se relaciona con los anteriores. Si no tienes bien definido tu mensaje de marketing y no tienes claro a quién te diriges, tu presencia online suele reflejarlo.
Y lo refleja porque no sabes qué decir sobre ti ni cómo decirlo. Tampoco sabes a quién dirigirte y, por tanto, no tienes una estrategia de publicaciones. Así que publicas de manera esporádica cosas que se te ocurren sobre la marcha. Seguramente tu blog no tenga continuidad ni coherencia.
Y eso mismo es lo que sucede con tus redes sociales o tu lista de correo.
Como colofón, el diseño de tu web está poco cuidado y presenta un aspecto abigarrado y poco profesional.
Es lógico, porque si no sabes qué decir ni a quién, tu web es algo totalmente secundario. Y como es algo secundario no inviertes en ella tiempo ni recursos.
El resultado: tu presencia online es pobre, amateur; tu web es un «espantavisitas» que no inspira confianza.
Solución:
Define tu mensaje de marketing. Identifica a tus potenciales lectores.
Revisa tu web y asegúrate de que refleja quién eres y de que se dirige a tu lector ideal.
Dale un lavado de cara a tu página: compra un dominio propio, elige una plantilla con un diseño sencillo y limpio.
Crea un calendario de publicaciones y empieza a publicar de manera periódica. Dale difusión por todos los medios a tu alcance a las entradas de tu blog. Trabaja en tu lista de correo.
4. Precios bajos
Cuando no tienes bien definido quién eres y lo que haces y no te diriges a aquellos que son tu público objetivo; y cuando tu presencia online es pobre, porque el aspecto de tu web es descuidado y los contenidos pocos y mal trabajados, el resultado siempre es el mismo: pocas ventas.
Y cuando las ventas son pocas, casi siempre se recurre a una estrategia equivocada: bajar los precios.
Crees que por poner tu libro a 0,99 € vas a vender más, pero por desgracia no es así.
Vender a bajo precio significa que tienes que vender mucho más, lo que siempre es difícil, para alcanzar el umbral de la rentabilidad. Ten presente que el trabajo de venta es siempre el mismo, pidas a cambio de tus libros menos de un euro o una docena.
Y vender a bajo precio significa que, de manera automática, el comprador percibe que la calidad del producto es menor. Sin duda es injusto, pero nuestro cerebro funciona así, como han demostrado numerosos estudios de economía conductual.
Por no entrar en consideraciones sobre la justa recompensa que merece tu trabajo: ¿has invertido tanto esfuerzo y tiempo para ganar unos pocos euros?
De todo esto hablamos en su día en este artículo, no te lo saltes.
La realidad es que poner precios bajos no es una buena estrategia. De hecho, ni siquiera es una estrategia. Más bien suele ser el fruto de la desesperación o del desconocimiento.
Solución:
¡Sube los precios!
En este artículo te damos las claves para que calcules un precio justo para tus libros.
Y una vez que lo has hecho, asegúrate de que tu mensaje de marketing está claro. Que te diriges a tu lector ideal. Y que tu web es un primor y tu presencia online un gozo.
¿Por qué no te decimos que lo hagas al revés y que primero trabajes tu mensaje, te dirijas a tu público y adecentes tu web?
Porque si lo haces en ese orden vas a ir a tu ritmo. Y ya nos conocemos, la inercia puede más que los deseos de cambiar. Así que hacer todo lo anterior puede llevarte meses e inclusos años.
Pero si hoy subes los precios de todos tus libros tendrás un poderoso estímulo para ponerte manos a la obra.
Sentirás que ese nuevo precio más alto tiene que estar justificado o de lo contrario el lector pensará que le estás engañando y que el libro no lo vale. Así que te esmerarás en trabajar los otros tres pilares de tu posicionamiento como escritor.
Posicionamiento como escritor + estrategia
Una vez tengas tu posicionamiento como escritor bien definido es hora de que empieces a trabajar en tu estrategia de marketing.
Hay muchas cosas que puedes hacer si tienes tu web, un blog, redes sociales y una lista de correo.
Pero si trabajas en tu estrategia sin tener un sólido posicionamiento los resultados que esperas no llegarán. Te vas a esforzar mucho en escribir artículos para tu blog o en conseguir suscriptores, y seguirás sin ser capaz de vender tus libros.
¿Por qué?
Porque de nuevo la gente no tendrá claro que eres un escritor con varias novelas publicadas. Y porque la gente a la que llegues probablemente no sea la que estaría encantada de comprar tu libro, leerlo y recomendarlo a sus amigos.
Si te interesa hacer buen marketing y, en general, lanzar tu carrera de escritor, únete hoy a nuestra comunidad. Solo tienes que dejar aquí debajo tu correo y todas las semanas te haremos llegar nuevos artículos directamente a tu bandeja de entrada.
Estan genial los consejos, me preguntaba cual es el trabajo que puede tener un prota y eso desembocó a pensar ¿cuales son los trabajos en la fantasía?, ¿
será que me puede decir algunos?
Hola, Alvis:
Sería necesario conocer tu novela y el mundo que has creado para ella. Imagina que te decimos que tu protagonista podría trabajar como pesacdro, pero en el mundo imaginario de tu novela no existe el mar.
SOY SINCERA , CADA VEZ QUE LEO ESTOS BLOG SIENTO QUE SOY LO QUE USTEDES DICEN, SER UNA ESCRITORA DE VALIA. MUCHAS GRACIAS POR TODA ESTA ENSEÑANZA. EL VALOR SE RECIBE Y YA LO IMPARTIRE. PIENSO QUE EN BREVE TENDRE MI LIBRO LISTO. SALUDOS.
Claro que sí, Ana. Mucha suerte con tu libro.