Los diez errores más comunes en la autopublicación

Cada vez más escritores optan por la autopubliacción para poner sus obras en el mercado. No obstante, con frecuencia se cometen errores que, sin embargo, son fácilmente evitables.

10. «Puedo reutilizar el ISBN de un libro anterior que ya no voy a vender más»

No se puede reutilizar el ISBN, ni siquiera para una nueva edición de un mismo título. El ISBN es un identificador único que se asigna a cada edición de un libro.

9. «Todo el mundo conoce la letra de esa canción, así que no hay nada de malo en que la incluya en mi novela»

Al igual que las pinturas, poemas, o cualquier otra expresión creativa, las letras de canciones (incluso las muy populares) están protegidas por derechos de autor. Si se desea utilizarlas, lo indicado es obtener permiso primero.

8. «Las imágenes se ven bien en la pantalla, y eso significa que se verán bien cuando se impriman»

Los gráficos de las pantallas se visualizan con una resolución de 72 puntos por pulgada (dpi) en el espacio de color RGB (por Red-Green-Blue). Sin embargo, cuando se va a imprimir un libro, las imágenes a color deberán ser de 300 dpi en el espacio de color CMYK (Cian-Magenta-Yelow-Black). Así que hay que prestar atención a que la imagen que vemos en pantalla tenga la suficiente resolución para que se imprima correctamente.

7. «He escogido la fuente Arial para mi libro»

La mayoría de las personas no percibe las diferencias entre los distintos tipos de letra, diseño, remates, ligaduras y otros elementos de las tipografías, como sí lo hacen los profesionales. Pero el tipo de letra elegido para un libro importa, y mucho. Los tipos de letra clásicos, cuando se usan correctamente, producirán un libro hermoso y fácilmente legible.

6. «Me cobran 3.000 € por publicar mi libro, pero me dan diez copias gratis»

Si se desea autopublicar un libro a veces el mejor recurso es acudir a plataformas de autoedición como Bubok o Amazon. Porque las editoriales que cobran al autor por publicar su libro basan su negocio en las ventas a los propios autores.

Aquí te explicamos las diferentes opciones que tienes para publicar tu libro, para que tomes tu decisión con conocimiento de causa.

5. «Pensé que quedaría mejor escribir mi autobiografía para la contraportada en tercera persona»

Con mucho, la mejor manera de que la mayoría de los autores presenten la información sobre sí mismos en sus libros es usando un estilo claro y directo, en voz activa. Los intentos de crear estilos inusuales o puntos de vista extraños casi siempre fracasan.

Aquí tienes algunas ideas para escribir buenos textos para tu contraportada.

4. «Me dieron un buen precio por unidad, pero tenía que imprimir 10.000 ejemplares. Ahora no sé qué hacer con ellos»

Tener un plan de cómo se va a comercializar, publicar y vender un libro antes de entrar en producción es muy recomendable. Acudir a la impresión bajo demanda puede minimizar este tipo de riesgo, pero es imprescindible planificar la puesta en el mercado del libro, su precio de venta al por menor y su método de distribución, antes de su publicación.

3. «He incluido una factura en todos los ejemplares que he enviado para su reseña. Como son grandes empresas, pagarán»

La convención es que, al enviar un libro para su reseña en los medios, se pide el tiempo y el valioso espacio editorial de una publicación. Por ello, lo menos que se puede ofrecer es un ejemplar gratuito al crítico que se tomará la molestia de leer el libro y escribir sobre él.

2. «He ahorrado dinero en la impresión tratando de que el libro ocupe menos páginas»

Si bien es cierto que se puede ahorrar dinero en imprenta mediante la creación de un libro con menos páginas, una novela impresa con márgenes pequeños y líneas ajustadas difícilmente podrá ser leída por nadie. La maquetación de un libro difícil de leer es una forma rápida de perder lectores y, por lo tanto, dinero.

1. «¿Qué quieres decir, necesito un diseñador para la portada? ¿Pero los libros no vienen ya con tapas?»

La mayoría de servicios de autopublicación ofrecen programas de creación de portadas, pero es fácil adivinar qué cubiertas han sido diseñadas así. Si un libro es digno de publicarse y se quiere que la gente lo compre hay que entender que la portada es la principal forma en que los lectores lo identificaran. Sin duda, merece la pena contratar a un diseñador profesional que cree una buena portada en exclusiva. Si no te decantas por esa opción, aquí tienes algunas ideas sobre cómo crear una portada profesional para tu libro.

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