Para esta nueva edición hemos ampliado y revisado el temario y, además, lo hemos convertido en formato vídeo. Mientras trabajábamos en los nuevos materiales, hemos buscado ejemplos de escritores que hagan buen marketing para ilustrar las explicaciones. Escritores que tengan webs estratégicas y bien montadas, webs que al verlas sepas que ahí hay una persona que sabe lo que se hace. Y… nos ha costado mucho encontrarlos.
A día de hoy, a pesar de la gran cantidad (y calidad) de información que hay en Internet sobre cómo construir una marca personal, crear un plan de marketing, hacer email marketing, hacer marketing de contenidos, etc., la mayoría de los autores siguen haciéndolo, digámoslo sin ambages, mal.
Es normal que haya tantos autores quejándose de que no obtienen resultados cuando hacen campañas de marketing. Sentimos ser tan críticos, pero, a la luz de lo que hemos visto, sería realmente sorprendente que los obtuvieran.
Por eso hoy reunimos para ti algunos de los errores más pertinaces que hemos encontrado en las páginas webs de escritores a todo lo largo y ancho de la red. Mira cuáles son y luego repasa con atención tu web para comprobar si tal vez tú también caes en ellos.
1. No tener una web de escritor
Todavía hay muchos autores, con libros a la venta, que no tienen su propia web de autor. Tienen una página de autor en Amazon, sí, y tal vez perfiles en redes sociales. Pero no tienen una web.
La web es vital porque sostiene y transmite tu mensaje de marketing. Es el lugar que tú controlas para contar sobre ti aquello que quieres que la gente sepa. Para ofrecer tu mejor perfil, por decirlo de alguna manera.
Además, la web es el epicentro de algunas de las estrategias de marketing más eficaces y baratas: el marketing de contenidos y el email marketing. Sin ella, no podrás hacerlas y estarás perdiéndote dos formas poderosísimas de vender tus libros casi en automático.
2. No conocer a tu lector ideal
Todas las acciones de marketing apuntan hacia alguien: el lector ideal.
Aquella persona que va a estar encantada de comprar tu libro y va a disfrutar cada una de sus líneas y de sus palabras. Persona a la que tú tienes que conocer tan bien como te conoces a ti mismo.
Hay muchos autores que no saben quién es su lector ideal y solo con leer sus webs es posible darse cuenta de ello.
Este error suele ser consecuencia de no querer cerrarse puertas. Temes que si afinas demasiado, habrá gente que se quede fuera y no compre tu libro. Pero es justamente al contrario, si abres demasiado el foco es cuando tu mensaje no calará en nadie.
3. Enfocar mal el marketing de contenidos
Acabamos de mencionar el marketing de contenidos y hemos dicho que es una de las maneras más baratas de hacer marketing.
Este tipo de marketing consiste en crear contenidos que tu lector ideal considerará valiosos y que serán un primer punto de contacto contigo y con tu obra.
Todavía hay muchos escritores que no saben enfocar sus contenidos y crean artículos, podcasts o vídeos que no se dirigen a sus lectores ideales. En gran parte, como es lógico, porque no saben quiénes son esos lectores.
En este grupo se encuentran todos aquellos que tiene un blog de escritura en lugar de un blog de escritor. Es decir, todos aquellos que crean contenidos relacionados con la escritura.
Esos contenidos tendrán gran interés para otros escritores o personas que aspiren a serlo, pero resbalarán absolutamente sobre la piel de tu lector ideal.
No puedes hablar de cómo construir un personaje o cómo construir una trama y luego pretender vender una obra de ficción. El lector de tus contenidos no coincide con el lector de tu novela.
Por supuesto, los escritores son buenos lectores. Pero ¿quieres vender tu libro solo a escritores? Escritores hay miles, pero lectores hay millones, ¿qué prefieres?
Lo peor es que, en esta categoría, hay gente haciendo las cosas muy bien. Pero como fallan en su target, en su lector ideal, todo su excelente trabajo resultará en vano.
4. No tener una home estratégica
La home o página principal de tu web es muy importante. Es la que resume y aglutina tu mensaje de marketing, por eso deberías tenerla hecha un pincel.
Además, puede ser una página estratégica para captar suscriptores para tu lista de correo.
Pero la mayoría de las homes de las webs de escritor están hechas sin ningún mimo, para salir del paso.
El primer requisito para tener una buena home es trabajar muy bien tu mensaje de marketing. Si no lo has hecho, vas a caer en la tentación de usar tu página principal para dar la bienvenida a tus visitantes. Y no hay nada más antimarketiniano que esos mensajes de bienvenida. Si tienes uno en tu home, ¡bórralo, por favor!
5. No tener páginas de venta
Las páginas de venta siguen siendo las grandes ausentes.
¿Cómo vas a vender libros si no tienes páginas de venta?
Ya, que tú vendes en Amazon. Bueno, ¿y qué?
En tu web debería haber páginas de venta. Y no nos referimos a esa sección en la que aglutinas todas tus novelas juntas y despachas a cada una con una imagen de la portada y un breve resumen de su argumento.
Hablamos de páginas de venta individuales para cada libro. Con textos persuasivos, buenas imágenes, llamadas a la acción… Una página de la que el lector salga diciendo «Quiero leer ese libro ahora mismo».
Y luego si quieres condúcelo a Amazon para que haga allí su compra.
6. Hablar de ti
Puede parecer un sinsentido, pero tu web no tiene que hablar sobre ti.
Ni siquiera en esa página en la que los escritores os soléis explayar contando quiénes sois y que nunca habéis dejado de escribir desde que el Ratoncito Pérez os dejó como regalo un cuaderno el día en que se os cayó vuestro primer diente de leche.
Tu web, insistimos una vez más, tiene que hablarle a tu lector ideal. No desperdicies ni una de sus páginas hablando de ti cuando podrías estar contándole los relatos y novelas tan maravillosos que tienes para él y persuadiéndole de que los lea.
7. No tener cajetines de suscripción
Una web estratégica tiene cajetines de suscripción porque es una herramienta inmejorable para aumentar tu lista de correo.
Por lo tanto, tienes que empezar a construir tu lista poniendo bien accesibles esos formularios donde el suscriptor te dejará sus datos. (Respetando siempre el RGPD y la LOPD).
Y tienes que usar textos adecuados para convencer a cada uno de tus visitantes de que te dejen su correo.
Y, después, tienes que usar esos correos para algo más interesante que mandarles una newsletter. Pero esa parte ya no corresponde a la web, sino al email marketing, así que lo dejamos aquí.
8. Tener un diseño poco atractivo
En diseño web, como en casi todo, hay modas y tendencias.
Seguro que no saldrías a la calle con un outfit desactualizado, ¿por qué permites que tu web no esté a la moda?
Si la impresión general de tu web es desaliñada (cuando no directamente antiestética), esa es exactamente la impresión que se estará llevando de ti quien la visite. Y, como te explicamos aquí, la percepción que los lectores tengan de ti tiene mucha importancia.
Y una buena impresión es importante, porque ayuda a que las personas se hagan un buen juicio tanto de ti como profesional como de tu trabajo.
Cuida el diseño de tu web, es tan importante como el de tus libros.
Qué hay detrás de estos errores
Páginas obsoletas y poco atractivas; que hablan del escritor en vez de hablarle al lector; mal posicionadas ante los lectores ideales; con homes nada estratégicas y sin páginas de venta…
Detrás de todos esos errores se oculta una única realidad: que el escritor tras esa web no tiene un plan de marketing, ni objetivos ni estrategia.
Basta echar un vistazo a esas webs para comprender que esos escritores, si son ellos quienes se encargan de su marketing, y por bien trabajadas que estén sus novelas, jamás llegarán lejos.
Al menos en la mayoría de los casos. Existe el azar, existe la suerte y existe el boca a boca, que siempre ha funcionado muy bien en el mundo libresco. Pero para confiar en el azar, la suerte y el boca a boca realmente no te hace falta tener una web.
Si la tienes es que esperas obtener ciertos resultados con ella. Puede que no te hayas parado a considerar exactamente qué resultados, pero algo esperas.
- Ese sería el primer paso: reflexionar con detenimiento acerca de qué resultados y objetivos esperas alcanzar con tu web.
- El segundo paso sería evaluar qué herramientas y estrategias tienes a tu alcance para alcanzar esos objetivos.
- Y por último tendrías que implementar determinados cambios en tu web encaminados a incorporar esas herramientas y estrategias, para empezar a realizar las acciones precisas que te llevarán directo a esos resultados.
No es nada complicado si sabes lo que tienes que hacer y cómo hacerlo. Si conoces las herramientas, cómo manejarlas y para qué usarlas.
Trabajarás tu marca personal y tu mensaje de marketing. Sabrás qué partes tiene que tener tu web para ser realmente estratégica. Lo aprenderás todo sobre el marketing de contenidos y el email marketing. Y construirás un plan de marketing efectivo, adaptado a ti, a tu obra y a los objetivos que deseas alcanzar.
Por fin venderás libros y tendrás lectores agradecidos, felices por haber descubierto tus obras. Para que tu trabajo de escritor y todos los desvelos que te tomas para escribir obras únicas tengan la recompensa que mereces.
Hola una consulta hace unos días que me estoy leyendo sus artículos y empecé a hacer el trabajo previo para después poder armar bien la estructura de mi libro mi duda es la siguiente : aún si no quisiera vender como tal mi libro solo que se me reconozca donde me conviene hacer una de las webs de escritores que mencionan en este post?? Espero su respuesta desde ya muchas gracias.
Hola, Micaela:
Te pasamos un enlace en el que se recopilan los artículos más interesantes del blog sobre marketing: https://www.sinjania.com/itinerario-marketing/
Esperamos que te ayude.
Un saludo.
Ajá, pero tengo una duda:
En lugar de web, ¿serviría también un canal de youtube? Porque sería una opción
Hola, Natha:
Las redes sociales (incluido YouTube) son canales que pueden ayudarte a difundir tu mensaje de marketing y tu marca personal para llegar a más lectores. Siempre, naturalmente, que sepas que tu lector ideal es ususario habitual de YouTube, de otros modod estarías perdiendo el tiempo.
El problema con YouTube o cualquier otra red social es que no es tuyo. Puede cambiar sus reglas en cualquier momento o, aunque parezca inimaginable, cerrar o dejar de tener el favor de los usuarios (ya ha ocurrido antes con otras redes sociales). Si algo así ocurriera tú habrías perdido todo lo construido: seguidores, estrategia, marca personal… Eso es algo que nunca podrá suceder si tienes tu propia web.
Si bien esta no es la única ventaja de tener una web propia, porque hay un montón de estrategias de marketing muy poderosas que no puedes usar si «estás en casa de otros» en lugar de construir la tuya propia.
Un saludo.