Te presentamos el decálogo del buen crítico literario:
- Serás independiente, competente y sincero. El amiguismo y los compromisos son las lacras de tu oficio.
- Serás el hombre (o la mujer) más culto de tu era.
- Confiarás en tus instintos. Si te sedujo por algo fue.
- Oirás a Nietzsche. Optarás por la soledad de los lobos en lugar del calor de los rebaños. Recuerda que las empresas de comunicación tienen su propia agenda.
- Ignorarás el canto de las sirenas ideológicas. Arderás por siempre en el averno si osas condenar a un escritor por esgrimir ideas diferentes a las tuyas.
- Cultivarás tu propio jardín. El estilo es la única herramienta de que dispone el crítico para persuadir. «Si resulta mediocre o incompetente en este aspecto, su eficacia será nula», destaca el gran Ignacio Echevarría.
- Dedícale a la obra tiempo de reflexión.
- Investiga el contexto. Conocer al autor (y a la era del autor) mejora la comprensión de la obra. No leas otras críticas hasta después de haber concluido la tuya.
- Da razones. Aplica algún parámetro objetivo. Harold Bloom postula que la fuerza estética es la combinación de cinco valores: originalidad, poder congnitivo, sabiduría, exuberancia en la dicción, manejo de la metáfora.
- No te dejes intimidar. Hasta los más grandes tienen sus días malos.
Fuente: Trucos de escritor